¿Te has puesto a pensar cómo afectan tus deudas tu salud mental?
Una investigación realizada por la Universidad de Southampton y por la Universidad de Kingston en Inglaterra (2013) analizó la relación entre los problemas de salud y de las deudas. En esta última se detectó que más del 25% de los participantes que estaban endeudados tenían problemas de salud mental.
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Por su parte, un estudio realizado por la antropóloga Elizabeth Sweet, que estudia la relación entre las deudas y la salud en la Universidad de Massachusetts, en 2014 encontró que las deudas podrían contribuir al desarrollo de una salud precaria.
La mayoría de los estudios existentes al respecto, relacionan enfermedades como el estrés, la ansiedad y la depresión con situaciones económicas difíciles. De igual manera, según los expertos pueden desencadenarse problemas físicos como enfermedades gastrointestinales, lumbares o cefaleas.
Los especialistas en salud mental mencionan que muchas de las causas de estas enfermedades se deben a la preocupación por las deudas y las obligaciones financieras personales. La mayoría de los casos se presentan por las altas expectativas que tienen las personas al solicitar un crédito para satisfacer sus necesidades. Sin embargo, cuando estas personas llegan al sobre endeudamiento, al no poder pagar sus obligaciones, se llenan de frustración, sienten culpabilidad y vergüenza y como consecuencia desestabilizan su estado emocional.
Esta falta de estabilidad emocional lo puede llevar a presentar alteraciones de sueño, falta de concentración, estrés, ansiedad y depresión.
¿Qué hacer en situaciones como estas? La solución es encontrar al equilibrio financiero y emocional, lo cual se logra a través de la educación financiera y un tratamiento. Algunas recomendaciones que hacen los especialistas de la salud mental son las siguientes:
• Buscar información sobre cómo solventar los compromisos financieros.
• Tener algún tipo de distracción que lo aleje de mantener su mente concentrada en sus problemas financieros.
• Tener hábitos saludables: comer bien, dormir bien, hacer actividad física. Esto ayudará a mitigar sintomatología ansiosa o depresiva.
• Crear estrategias familiares para mejorar la sintomatología y para sacar adelante las obligaciones.
• Buscar ayuda en el momento oportuno.